Del sábado 21 al sábado 28 de enero se reunió en Córdoba el XXI capítulo general de las Hermanas Dominicas de San José, conocidas como dominicas cordobesas por haber sido fundadas hace ciento treinta años en la capital de la provincia mediterránea y desarrollar la mayoría de sus actividades en territorio cordobés.  Al anunciar el capítulo, la priora general de la congregación, madre Liliana Alfonzo, pidió oraciones para que este capítulo “sea una manifestación clara de la voluntad de Dios que en su providencia dirige el camino de las familias religiosas que desean permanecer fieles al carisma fundacional, al Santo Padre y a las necesidades de todos los hombres”.  El sábado 28 de enero, fiesta del santo dominico Tomás de Aquino, las religiosas capitulares procedieron a elegir las nuevas autoridades que regirán la congregación durante los próximos seis años.  Resultó reelegida como priora general la madre Liliana Alfonzo, a quien acompañarán en el Consejo General las madres Raquel Correa, como vicaria general, y como consejeras las madres Anastacia Valenzuela, Soledad Isola y Graciela Correa.  La Congregación de las Hermanas Dominicas de San José fue fundada el 9 de octubre de 1886 en Córdoba, por el dominico fray Reginaldo Toro, quien un año después fue elegido por el papa León XIII obispo de Córdoba.  La misión de la nueva congregación está expresada en las palabras del fundador: “Abrazar la humanidad que sufre”, “preparar el corazón y la inteligencia de los niños y jóvenes”.  Esta familia religiosa está extendida en diferentes puntos del país, atendiendo colegios, hogares de niños y obras misioneras en lugares carenciados. Su casa generalicia está en la ciudad de Córdoba, donde además se encuentra la capilla de San José, que en este 2017 cumple 100 años y guarda los restos del padre fundador.+